El 20 de noviembre marca el 11.º Día Internacional del Recuerdo de las Personas Transgénero destinado a honrar a aquellos que han muerto debido a la violencia contra las personas transgénero. Hoy crea conciencia pública sobre los crímenes de odio contra las personas transgénero y honra el trabajo de quienes continúan trabajando hacia la inclusión total. En un momento histórico para los derechos civiles y humanos en los Estados Unidos, El presidente Obama promulgó el proyecto de ley sobre delitos de odio el 28 de octubre de 2009.. La medida amplía la ley actual de delitos de odio para incluir la violencia basada en el género, la orientación sexual, la identidad de género o la discapacidad.
Después de firmar el proyecto de ley, el presidente Obama hizo algunos comentarios y se dirigió específicamente a los legisladores:

“Ustedes entendieron que debemos oponernos a los delitos que tienen como objetivo no solo quebrar huesos, sino también quebrar espíritus, no solo infligir daño, sino infundir miedo”, dijo Obama. “Usted entiende que los derechos otorgados a todos los ciudadanos en virtud de nuestra Constitución no significan nada si no protegemos esos derechos, tanto de leyes injustas como de actos violentos”.

Al abordar las necesidades y los recursos de los estudiantes lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, queer e inquisitivos (LGBTQQ), los campus universitarios a veces centran la atención y los recursos exclusivamente en los estudiantes que se identifican como gays o lesbianas, a menudo ignorando a los que se identifican como transgénero. A pesar de la escasez de investigaciones sobre la violencia en la comunidad transgénero, los datos existentes demuestran que las personas transgénero corren un mayor riesgo de sufrir abusos por parte de la policía y los profesionales médicos, además de ser objeto de violencia callejera y abuso doméstico o de pareja íntima.
Un enfoque para tener más servicios contra la agresión sexual inclusivos para personas transgénero es a través de la educación y la concientización. Al desarrollar y mantener relaciones profesionales significativas con el personal y los estudiantes en el centro LGBTQ de su campus o el centro LGBT local, no solo amplía las habilidades y el conocimiento del personal, sino que, en última instancia y lo más importante, mejora la prestación de servicios y el alcance a los estudiantes transgénero que a menudo experimentar alienación y acoso. Al ser más trans-inclusivas, las instituciones dan un paso necesario hacia la creación de una comunidad universitaria más segura para todos.
Para obtener más información, consulte el Coalición Nacional de Programas contra la Violencia (NCAVP) para recursos cerca de usted.