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El jueves 10 de junio, ValorUS (VALOR) envió un comentario público a la audiencia de la Oficina de Derechos Civiles de conformidad con la Orden Ejecutiva 14021, Garantía de un entorno educativo libre de discriminación por motivos de sexo, incluida la orientación sexual o la identidad de género.

VALOR se une a las preocupaciones planteadas por varias organizaciones nacionales de defensa, instituciones educativas y los propios estudiantes que han demostrado que, en esencia, las regulaciones de DeVos han tenido el efecto de desalentar a los estudiantes de denunciar agresiones sexuales y otras formas de acoso sexual. Además, las nuevas regulaciones contradicen completamente el propósito del Título IX como una ley de derechos civiles, que es proteger el acceso equitativo a la educación, erigiendo barreras intimidantes y dañinas para las personas afectadas en todo momento, y replicando un enfoque traumático que priva a los sobrevivientes de sus derechos. agencia y su dignidad.

La experiencia y el estrés del acoso sexual crean barreras significativas para el éxito de los estudiantes en la escuela, lo que se agrava aún más cuando una escuela no responde o no puede responder de manera efectiva con apoyo para el estudiante. Los impactos en los estudiantes pueden incluir serios problemas emocionales y de salud mental, como ansiedad, depresión y uso y abuso de sustancias, tanto en la crisis inmediata como durante varios años después. Los estudiantes pueden abandonar la escuela porque no se sienten seguros o pueden verse obligados a abandonar la escuela debido a problemas de rendimiento relacionados con el trauma. Además del trauma físico y emocional, también existen cargas financieras relacionadas con préstamos estudiantiles, costos de tratamiento y gastos adicionales de reubicación. Los estudiantes sobrevivientes necesitan apoyo y entornos de aprendizaje libres de discriminación, de lo contrario, se enfrentan a resultados de vida devastadores que son costosos y difíciles de superar.

En nombre de los sobrevivientes, los proveedores de servicios de agresión sexual y los diversos defensores y activistas que brindan una respuesta de primera línea a la agresión sexual en nuestras comunidades, y con base en las razones antes mencionadas, VALOR alienta encarecidamente al presidente Biden, al Departamento de Educación y a toda la administración a revertir los elementos dañinos de las regulaciones del Título IX que nos han hecho retroceder peligrosamente en nuestra respuesta nacional a la violencia sexual. Damos la bienvenida a cualquier oportunidad de proporcionar aportes e información adicionales para este esfuerzo.

 

CONTACTO: John L. Finley, Gerente de Políticas (jfinley@valor.us)